Y los días corren uno detrás del otro,
Iluminan mi ventana con la luz del día,
El sol posa sobre mi casa cada mañana,
Y el corazón bombea con toda certeza.
Mirando hacia las nubes veo mi destino,
Despejado y claro como nunca había visto,
Radiante e intenso, como si no hubiese viento,
Con nubes blancas y suaves sin remolinos.
Y Aunque el cielo nunca es estático,
Y el clima pocas veces es estable,
Los paisajes que regala son agradables.
No todos deben ser siempre iguales,
Natural es que sigan cambiantes,
Porque así es el cielo, el cielo azul.
-Alexios Ivany


